Los inversores en el emisor de tarjetas de pago Wirecard han acusado a la Autoridad Federal de Supervisión Financiera de Alemania (BaFin, por sus siglas en inglés) de negarse a abrir una investigación sobre la administración de la empresa, que es sospechosa de fraude financiero.
Según ha informado Bloomberg, los demandantes aseguran que el regulador debería haber estado al tanto de los problemas financieros de Wirecard AG, que supuestamente sufre desde principios del año pasado. Sin embargo, la institución habría descuidado sus obligaciones. Andreas W. Tilp, abogado de los demandantes, ha declarado:
"Si el regulador hubiera cumplido adecuadamente con sus deberes, este habría estado al tanto de los problemas de la empresa mucho antes".
Según se ha informado, el BaFin ha estado ignorando los informes de inversores, periodistas y autoridades sobre las maquinaciones de Wirecard durante 10 años. Por su parte, el regulador ha puesto su atención en los vendedores en corto.
Sin embargo, un portavoz del BaFin ha cuestionado la legalidad de la demanda y ha dicho que la agencia actuó en interés público y no en interés de los inversores, "en línea con las indicaciones de irregularidades".
Recordemos que en junio se supo que Wirecard tenía un agujero de 1.900 millones de euros y poco después entró en quiebra.