Las fuerzas del orden de Singapur se han incautado de alrededor de 1.800 millones $ como resultado del caso de lavado de activos digitales más grande del país.
Según ha informado Bloomberg, la policía también ha confiscado cuentas bancarias por valor de más de 825 millones $ así como 27 millones $ en criptomonedas.
La policía arrestó a mediados del mes pasado a diez ciudadanos chinos bajo sospecha de estar implicados en blanqueo de dinero y falsificación de documentos.
Según se ha informado, estos supuestamente participaron en el blanqueo de dinero procedente de actividades delictivas organizadas en el extranjero, incluido el fraude online y los juegos de azar.
Como resultado del caso, los bancos de Singapur han reforzado el control sobre los clientes chinos. Incluso algunos prestamistas están revisando la apertura de nuevas cuentas y transacciones.
Cabe destacar que, según Bloomberg, al menos un banco internacional ya ha dejado de prestar sus servicios a varios ciudadanos de Camboya, Chipre, Turquía y Vanuatu.