La administración ha dado un paso clave para facultar al IRS para supervisar las transacciones internacionales con criptomonedas de los estadounidenses.
La Oficina de Información y Asuntos Regulatorios (OIRA) de la Casa Blanca está revisando actualmente una propuesta de norma para implementar el Marco Global de Información sobre Criptoactivos (CARF).
Esta medida sigue a un informe publicado este verano por la Casa Blanca en el que se recomendaba al IRS y al Tesoro que establecieran normas para el CARF, una norma internacional diseñada para combatir la evasión fiscal al exigir a los proveedores de servicios de activos digitales que informen a las autoridades de las transacciones de sus clientes.
La administración sostiene que la aplicación del CARF disuadirá a los contribuyentes de trasladar sus activos a plataformas extraterritoriales y nivelará el campo de juego para las empresas con sede en Estados Unidos.
